martes, 6 de junio de 2006

Glòsoli

Glósoli, de Sigur Rós

Tenía ganas de esto, y de compartirlo también, como en su día hicieron conmigo.

Instrucciones para el visionado del videoclip:

- Apagar las luces de la habitación donde estés.

- Elegir un momento idóneo, esto es, al llegar de trabajar, cuando se está hipersensible, cuando quieres escaparte o meterte en una burbuja...o tantos otros.

Resultado: carga emocional, leve aceleración del ritmo interno, sensación de libertad, de liberación, de libertador.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

gracias¡¡

Anónimo dijo...

¿Niños que vuelven al pais de Nunca Jamás?
Jajaja, bonito.
Lo mejor: la mano que busca la niña cuando está durmiendo...y el echar a volar, por supuesto.
Lo peor: ¿por qué se suicida el más pequeño?

Anónimo dijo...

uff...gracias por recordarmelo!! qué gran video...

Anónimo dijo...

Un videoclip precioso. Juan Salvador Gaviota convertido en música. El pequeño no se suicida,llega a volar. A veces hay que saltar, para poder volver a volar otra vez sin miedo a que tus alas de cera vuelvan a ser derretidas por el sol.

Anónimo dijo...

es verdad!
gracias por traerlo de vuelta.